La inconfundible silueta de los galeones surcó los mares durante los siglos XVI y XVI, época en la que el dominio marítimo de estas naves fue absoluto. El "San Giovanni Battista", con su porte majestuoso, sus cinco cubiertas, sus tres palos, la potencia de sus cañones y su estilizada y ornamentada popa, fue posiblemente uno de los mas bellos construidos.